La estrategia de inserción de dirigentes peronistas en estructuras partidarias ajenas al propio peronismo no es nueva, hoy en día se combina dicha estrategia con una especie de ley de lemas encubierta, con matices, dada por la presencia de las llamadas boletas colectoras, en función de las cuales la interna del PJ se dilucida en la elección general.
Es decir, que los mecanismos de burla de la voluntad popular van desde la confusión hasta el mismo engaño.
Confusión porque se disfraza a un candidato peronista de algo que no es, y ésto es: un opositor, valiéndose para ello de nuevas estructuras, -¿recuerdan el FREPASO y PAIS?-, o de estructuras tradicionales, tal el caso de la UCR, en este último caso seguimos pecando de ingenuos, o negligentes según como se vea, sin descartar intereses pequeños de sectores que responden a sus propios intereses.
¿Recuerdan a Bordón?, aún nadie se puede explicar lo contento que estaba cuando perdió. ¿Recuerdan a Carlos Álvarez?, uno de los artífices de la “Alianza” y uno de los causantes del descalabro del 2001, bueno, los dos son funcionarios del Gobierno Kirchnerista.
Y ahora esperemos que la tercera sea la vencida.
El mismo camino ha seguido el peronista Lavagna, no le importó la respuesta de la sociedad a su propuesta opositora, carentes de escrúpulos fue consecuente con su “pensar” peronista. No es que haya vuelto al peronismo, es un lugar desde donde nunca se fue y al cual sigue respondiendo disciplinadamente, respondiendo al Jefe, en forma sumisa y sin culpas.
Las cuestión de las llamada boletas “colectoras”, seguramente será tratada en detalles en otra oportunidad, con el tiempo y el análisis que la importancia de dicho tema amerita, y sin la premura que tienen los tiempos políticos.
Llegó el momento de la reconstrucción!
Terminar con las ingenuidades y las alianzas tejidas en función de intereses mezquinos y de espaldas a los afiliados y la sociedad.
Es decir, que los mecanismos de burla de la voluntad popular van desde la confusión hasta el mismo engaño.
Confusión porque se disfraza a un candidato peronista de algo que no es, y ésto es: un opositor, valiéndose para ello de nuevas estructuras, -¿recuerdan el FREPASO y PAIS?-, o de estructuras tradicionales, tal el caso de la UCR, en este último caso seguimos pecando de ingenuos, o negligentes según como se vea, sin descartar intereses pequeños de sectores que responden a sus propios intereses.
¿Recuerdan a Bordón?, aún nadie se puede explicar lo contento que estaba cuando perdió. ¿Recuerdan a Carlos Álvarez?, uno de los artífices de la “Alianza” y uno de los causantes del descalabro del 2001, bueno, los dos son funcionarios del Gobierno Kirchnerista.
Y ahora esperemos que la tercera sea la vencida.
El mismo camino ha seguido el peronista Lavagna, no le importó la respuesta de la sociedad a su propuesta opositora, carentes de escrúpulos fue consecuente con su “pensar” peronista. No es que haya vuelto al peronismo, es un lugar desde donde nunca se fue y al cual sigue respondiendo disciplinadamente, respondiendo al Jefe, en forma sumisa y sin culpas.
Las cuestión de las llamada boletas “colectoras”, seguramente será tratada en detalles en otra oportunidad, con el tiempo y el análisis que la importancia de dicho tema amerita, y sin la premura que tienen los tiempos políticos.
Llegó el momento de la reconstrucción!
Terminar con las ingenuidades y las alianzas tejidas en función de intereses mezquinos y de espaldas a los afiliados y la sociedad.
1 comentarios:
lo felicito por la claridad con que escribe. Como dijo Albert Camus"Los que escriben con claridad tienen lectores; los que escriben oscuramente tienen comentaristas".- Otra vez felicitaciones.-
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